La directora de la Agencia de El Salvador para la Cooperación Internacional (ESCO), Karla de Palma, participó en la XXIX Cumbre Iberoamericana de Ecuador 2023-2024, en la que se fortalecieron los proyectos de cooperación sur-sur, enfocados en la colaboración entre países en vías de desarrollo.

Durante el evento, funcionarios de la ESCO y de Ecuador firmaron el acta del IV Programa de Cooperación Técnica y Científica, un acuerdo que permitirá consolidar la cooperación entre ambas naciones en áreas clave como la protección social, la salud, la producción, la energía, la agricultura y la cooperación. Esta colaboración se extenderá hasta el periodo 2024-2026.

Además, la delegación salvadoreña recibió el Catálogo de Cooperación Sur-Sur de Ecuador, que incluye buenas prácticas aplicables al contexto de El Salvador. Entre los proyectos que El Salvador ofrecerá a Ecuador se encuentran los espacios integrales familiares de la Dirección de Reconstrucción del Tejido Social, la prevención del Síndrome del Cuidador del ISRI y los emprendimientos dinámicos de Conamype.

Por su parte, Ecuador presentó proyectos enfocados en el uso de biomasa para la Comisión Ejecutiva Hidroeléctrica del Río Lempa (CEL), la gestión de evaluación de la cooperación internacional para la DGEHM, y la certificación orgánica y procesamiento de captura marina para el Ministerio de Agricultura y Ganadería.

El presidente de Ecuador, Daniel Noboa, hizo un llamado a la unidad de las naciones iberoamericanas durante la clausura del XV Cumbre Empresarial Iberoamericana, celebrada en la ciudad de Cuenca. Noboa destacó la importancia de la colaboración entre los países en un contexto internacional «complejo», horas antes de la inauguración de la XXIX Cumbre Iberoamericana, que se prevé será histórica por el número de líderes ausentes.

Acompañado por el rey Felipe VI de España, el presidente de Portugal, Marcelo Rebelo de Sousa, y el jefe de Gobierno de Andorra, Xavier Espot, Noboa expresó que Ecuador asumió la organización de la cumbre «con gran responsabilidad» a pesar de la situación política interna y los desafíos internacionales que enfrentan varios países en la región.

Dirigentes de todo el espectro político francés y representantes del sector agropecuario se han unido con inusual unanimidad para oponerse al acuerdo comercial entre la Unión Europea (UE) y el Mercosur, argumentando la necesidad de proteger la agricultura y el medio ambiente.

La Comisión Europea, que actúa como el brazo ejecutivo de la UE, pretende firmar antes de fin de año un tratado de libre comercio con los países del Mercosur (Argentina, Brasil, Paraguay, Uruguay y Bolivia, aunque esta última no participa activamente en el acuerdo). Sin embargo, Francia rechaza los términos propuestos en el acuerdo actual.

El primer ministro francés, Michel Barnier, declaró este miércoles en Bruselas: “En las condiciones actuales, este acuerdo no es aceptable para Francia, y no lo será”. Tras reunirse con la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, Barnier advirtió: “Recomiendo que no se ignore la posición de un país como Francia”.

Más de 600 parlamentarios franceses, entre diputados, senadores y eurodiputados, enviaron el martes una carta a Von der Leyen manifestando su rechazo al tratado.

Para bloquear el acuerdo, Francia necesita conseguir una minoría de bloqueo en el Consejo de la UE, lo que requeriría el apoyo de al menos cuatro de los 27 Estados miembros. Alemania y España respaldan el acuerdo, mientras que Polonia y Austria se oponen. Otros países, como Italia, Irlanda y los Países Bajos, aún no han definido su posición, según fuentes diplomáticas en Bruselas.

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CEL