El gobierno de Daniel Ortega ha expulsado al obispo Carlos Herrera, presidente de la Conferencia Episcopal de Nicaragua (CEN), informaron este jueves opositores y medios de prensa en el exilio. La noticia fue confirmada a la AFP por fuentes religiosas, que señalaron que Herrera fue enviado a Guatemala. Aunque algunos opositores y periodistas nicaragüenses en Costa Rica confirmaron la expulsión, aún no hay evidencia de su llegada a Guatemala, según indicó Martha Molina, investigadora de asuntos religiosos desde Estados Unidos.

Monseñor Carlos Herrera, obispo de la diócesis de Jinotega, ha sido un importante líder de la Iglesia católica en Nicaragua y presidente de la CEN desde 2021. Su expulsión se suma a la de otros dos obispos, Rolando Álvarez de Matagalpa e Isidoro Mora de Siuna, quienes también fueron detenidos y luego acogidos en Roma tras ser acusados de apoyar las protestas de 2018, que el gobierno de Ortega califica como un intento de golpe de Estado, respaldado por Estados Unidos.

Durante su visita a las zonas inundadas de Costa Rica, afectadas por el paso del huracán Rafael, el presidente Rodrigo Chaves aprovechó la oportunidad para agradecer al contingente de rescatistas salvadoreños que están trabajando en el sur del país, específicamente en Puntarenas y Guanacaste. El mandatario costarricense estrechó manos y abrazó a los socorristas, destacando su labor en medio de la tragedia.

Chaves mencionó que, aunque la misión humanitaria ha sido bien recibida por la mayoría de los afectados, un pequeño grupo de costarricenses ha expresado «miedo» ante la ayuda enviada por El Salvador. «Que Dios los bendiga, al pueblo salvadoreño por la ayuda», expresó Chaves. Frente a uno de los rescatistas, añadió: «Yo lo veo a usted y no entiendo, usted viene de la mano de Dios a ayudar a un pueblo hermano. ¿Por qué le tienen tanto miedo? No ven ustedes colegas que esta gente viene con el corazón abierto a ayudar a un pueblo hermano, mientras hay un puñito de costarricenses que dice ‘uy, qué miedo, vino el Mayor Vásquez a ayudar'».

En un gesto de agradecimiento, Chaves le dio un abrazo a un socorrista salvadoreño y le regaló un crucifijo, diciéndole que era para que «Dios lo cuide». Desde el miércoles, el presidente ha estado recorriendo las zonas costeras de Puntarenas y Guanacaste, las más afectadas por las lluvias, donde la Comisión Nacional de Prevención de Riesgos y Atención de Emergencia de Costa Rica ha declarado alerta roja.

El gobierno de Honduras declaró este jueves alerta roja en cuatro departamentos del Caribe ante el inminente impacto de la tormenta tropical Sara, según informó la presidenta Xiomara Castro y el Ministerio de Gestión de Riesgos.

El Centro Nacional de Huracanes (CNH) de Estados Unidos señaló que Sara está provocando intensas lluvias en varias zonas de Honduras, y que se esperan inundaciones repentinas y deslizamientos de tierra potencialmente catastróficos durante el fin de semana.

Se prevé que la tormenta mantenga su posición «semiestacionaria» frente a la costa Caribeña de Honduras desde este jueves hasta el domingo.

La Comisión Permanente de Contingencias (Copeco) activó la alerta roja en los departamentos de Islas de la Bahía, Atlántida, Colón y Gracias a Dios, en la costa caribeña, durante un período de 72 horas a partir de este jueves. Esto implica la evacuación de áreas en peligro y el traslado de personas a albergues temporales. Otras regiones del país se encuentran en alerta amarilla.

La presidenta Castro, a través de su cuenta en X, aseguró que las instituciones del sistema de emergencia están completamente activadas ante la amenaza de la tormenta, que podría intensificarse y convertirse en un huracán catastrófico.

Por su parte, en Panamá y Costa Rica, donde las lluvias asociadas a Sara ya han causado 11 y 2 muertes respectivamente en las últimas dos semanas, se mantiene también la alerta roja debido a la previsión de un incremento de las precipitaciones en los próximos tres días.