La Fundación Gabo expresó este lunes su profunda preocupación por la revocación del arresto domiciliario del periodista José Rubén Zamora Marroquín, ordenada por un juez penal de Guatemala, y calificó la medida como un intento de criminalizar el ejercicio periodístico.

En un comunicado, la organización creada por el Nobel de Literatura Gabriel García Márquez denunció que esta decisión evidencia la falta de independencia del sistema judicial guatemalteco y el creciente clima de hostilidad contra la prensa en Centroamérica.

El juez Erick García determinó que Zamora Marroquín, de 67 años, regrese a la prisión militar Mariscal Zavala, donde estuvo detenido más de 800 días, entre julio de 2022 y octubre de 2024. La decisión se produjo después de que la Sala Tercera de Apelaciones revocara las medidas sustitutivas que le habían permitido salir bajo arresto domiciliario dentro de un proceso por supuesto lavado de dinero.

La Fundación Gabo advirtió que el regreso del periodista a la cárcel lo deja en condiciones de alta vulnerabilidad y representa un nuevo golpe contra la libertad de prensa en la región.

El Volcán de Fuego de Guatemala, uno de los más activos del mundo, entró en erupción durante la noche, obligando a la evacuación de casi 300 familias. Sin embargo, las autoridades advierten que otras 30.000 personas en comunidades cercanas podrían estar en peligro.

Hasta el momento, no se han reportado víctimas, pero como medida de precaución, se han cerrado los centros educativos de la zona y una carretera clave que conecta varias localidades.

Más allá de la erupción en sí, el mayor riesgo lo representan los lahares: avalanchas de ceniza, roca, lodo y escombros capaces de arrasar comunidades enteras. Con una altura de 3.763 metros, el volcán –conocido en idioma cachiquel como Chi’gag o «el lugar donde está el fuego»– tuvo su última gran erupción en junio de 2023.

La erupción de 2018 fue una de las más devastadoras, dejando 194 muertos y 234 desaparecidos. Desde entonces, el volcán solo ha permanecido inactivo durante 50 días, según el Instituto Nacional de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología (Insivumeh).

Claudinne Ugalde, secretaria de la agencia de desastres, advirtió que “unas 30.000 personas están en riesgo en estas tres jurisdicciones, y estamos tratando de que evacuen o se autoevacúen”.

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Por su parte, la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred) ha instado a la población a revisar sus planes de emergencia y preparar una «mochila de las 72 horas» con suministros esenciales ante la posibilidad de una evacuación repentina.

En 2015, El Salvador registraba al menos dos feminicidios diarios, y entre 2016 y 2017, la tasa de estos crímenes oscilaba entre 12 y 16 por cada 100,000 habitantes.

Sin embargo, en los últimos años, los casos de violencia feminicida han mostrado una tendencia a la baja. Según datos de la Fiscalía y la Policía Nacional Civil, el promedio diario de feminicidios se redujo a 0.08 en 2024, en contraste con 1.28 en 2017. Desde 2019, esta disminución ha sido constante, algo que las autoridades atribuyen a las estrategias de seguridad implementadas y a los esfuerzos por fortalecer la protección de las mujeres.

Las cifras reflejan esta tendencia: en 2019 se reportaron 113 feminicidios, cifra que bajó a 73 en 2020, representando una reducción del 36 %. Para 2021, los casos descendieron a 68, un 40 % menos respecto a 2019. En 2022 se contabilizaron 53 feminicidios, en 2023 la cifra se redujo a 29 y en 2024 se registraron 30 casos. Para 2025, hasta el 9 de marzo, se han reportado tres feminicidios.

El gabinete de Seguridad ha reafirmado su compromiso de combatir todo tipo de violencia y garantizar justicia para las víctimas. «La justicia selectiva quedó atrás, estamos llamados a hacer justicia colectiva. No vamos a tolerar crímenes de sangre, delitos sexuales ni ningún acto de violencia», enfatizó el ministro de Seguridad, Gustavo Villatoro.